domingo, 7 de febrero de 2010

VOLTA A LA LLACUNA, Probike.

Día largo de bici. No empieza bien del todo, he dormido fatal, malestar del estómago, y eso que no cené nada raro ni en exceso, me he pasado la noche en vela. A las 6:45 suena el despertador, no perdona, el pobre hace lo que dicen!!!.

Desayuno poco y con prisas me preparo, visita al señor Roca, y a cargar la bici en el coche que a las 8:00 tengo que estar en Probike, Barcelona. Con la bici ya en el coche, vuelve corriendo a casa para una segunda visita al señor Roca, vaya día me espera!!!.

Consigo llegar a la hora, ya está casi todo la gente . A la vista el nivel es muy alto, pepinos de bicis, alguna parece un avión y gente muy en forma. Por fin salimos, empieza La Volta a la Llacuna. Salimos de Barcelona por la Gran Vía y Atuovía de Castellfefels, el ritmo es muy lento, esto no ha hecho más que empezar. Primeros momentos de rodar en grupo. Al dejar la autovía para ir hacia Viladecans nos detenemos, alguien por atrás ha pinchado.

Al momento se empieza a ir la gente “vamos tirando tranquilos”. Yo me quedo con cinco más, si pincho me gustaría que me esperaran, pues toca esperar. A los pocos minutos llega el pinchado con 4 más, vuelta a la carretera. Primer calentón del día, todos en fila detrás de un triatleta que va acoplado, en llano y rozando los 40 KM/hora, muy divertido pero seguro que lo pagaré tarde o temprano. Hemos cogido el grupo, llegamos a la primera subida, me relajo y la hago a mi ritmo, me quedo en tierra de nadie, el grupo está a pocos metros pero se va alejando, más gente por detrás pero se van quedando, así que sin compañía completo los 400 metros de desnivel y pasando Begues me encuentro al resto en el primer reagrupamiento.

Comentamos la jugada con Lluís, hemos charlado antes en la autovía mientras rodábamos en paralelo. El grupo sale, nos despistamos y nos sacan un centenar de metros, hace bajada pero sopla un molesto viento en contra, decidimos darnos relevos para cogerlos, me pongo a tirar más de 40 KM/hora, Lluís que no pasa, el viento es muy molesto y supone un gran esfuerzo, me dice que él no puede dar relevo que va a tope ya, aflojamos, no hay forma de cogerlos, yo sólo no puedo, nos resignamos y disfrutamos del paisaje y la carretera mientras contamos batallitas. El hizo su primer Iron Man en octubre, el de Calella, muy mal sabor de boca así que espera sacarse la espinita en el Iron Cat esta primavera.

Llegamos a Avinyonet, buen ritmo pero el esfuerzo ha sido considerable por culpa del viento. Segundo reagrupamiento, cojo agua en una fuente.

No nos van a volver a coger desprevenidos, esta vez salimos los primeros!!!. Nos absorbe el pelotón y rodamos cómodamente unos 20 KM hasta el inicio de la subida a La Llacuna, no hay color, así es mucho más cómodo, ir en pelotón es un chollo!!!

Llegamos a la subida, cuando coronemos estaremos a mitad de recorrido, más o menos, aunque con la parte más dura superada. Me lo tomo con mucha calma, a mi ritmo, el pelotón se aleja, vaya máquinas!!! llevan motor???. Me como una barrita para no llegar arriba vacío, voy haciendo, Lluís se ha adelantado aunque no lo pierdo de vista. A partir de media subida me voy acercando a él y un grupo de 4 ciclistas más, los cojo, lo paso y LLuis se viene conmigo, seguimos subiendo y contando más batallitas. Coronamos los más de 20 KM de ascensión para 600 metros positivos, 2 KM de bajada y llegamos al pueblo, en el bar están todos avituallándose.

Cocacola, bollycao (que parece que ahora se llama Xipi Cao, cosas de la edad…) llenar el bidón de agua y sales y estirar las piernas. El grupo se va, sigue llegando gente. Lluís y yo decidimos salir, el siguiente grupo aún tardará en ponerse en marcha.

Solos en la carretera, rompepiernas total, tiende hacia abajo claramente pero con repechos cada dos por tres. En las bajadas apretando y en las subidas también, ritmo alto, viento, mucho viento, igual que antes tiro yo, por lo menos Lluís reconoce que detrás se va muy bien. Intenta dar relevos pero cuando se expone al viento baja mucho el ritmo, así que vuelvo a tirar yo.

Vamos muy bien, pasando pueblos, carreteras tranquilas excepto por la cantidad de motos que se creen que están en Montmeló, pero bien, sin incidencias.

La ruta es muy bonita, carreteras entre bosques y viñas, hemos visto la costa de Vilanova i Calafell, hemos disfrutado de una vista impresionante de Montserrat y al fondo los Pirineos nevados, y La Mola, mi Mola, también estaba ahí.

En Gelida nos detenemos un momento para llenar el bidón y comer una barrita rápido, vamos muy animados, muy contentos con el ritmo pese a la dureza de la ruta, el kilometraje y el viento, el maldito viento. Llegamos a Martorell, hemos de seguir por la NII-A hacia Sant Vicenç, pero nos equivocamos y casi acabamos en la autopista, media vuelta, salta una mediana,…..un show, en fin, vuelta a Martorell, 12 KM extras y golpe mental. En una gasolinera pregunto y me indican el camino, por delante vemos a un grupo de 5 que son de los nuestros.

A partir de aquí tengo muchas ganas ya de llegar y aún nos queda un buen rato, más de 30 KM. Me ha tocado la moral la perdida, los KM extra y el tiempo añadido, las ganas de llegar me hacen ponerme a tope, paso al grupo y Lluís se queda un poco, sigo tirando, aquí el viento es terrible, aún así siendo llano el cuenta KM no baja de 28 KM/hora, voy fuerte, desfondándome pero fuerte por las ganas de llegar. Semáforo, rotonda, aflojo un poco para tomar una glucosa y veo que Lluís se acerca con otro chico, les espero y me siguen, no dan relevo, yo sigo a lo que puedo, a tope, la llegada Cornellà se hace de rogar, voy reventado, lo he dado todo en los últimos 15 KM, pero tengo es sensación de haber hecho algo “grande”, buen trabajo de fuerza y sufrimiento el de estos más de 30 minutos.

Cornellà, ya solo pienso en llegar, es más tarde de lo que creía, tengo ya el culo dolorido y sobre todo las cervicales, además me siento ya vacío, el estómago pide algo más sólido que barritas, geles, glucosas y agua con sales.

Por fin, el coche, me despido de Lluís, mi compañero de hoy, me ha salvado de la soledad absoluta gran parte de la ruta y yo le hecho un muy buen trabajo con el viento, lo hemos pasado bien, a ver si volvemos a coincidir.

Han sido un total de 7h30 de las que 6:48 hemos estado pedaleando, se ha parado muy poquito. Total de 172 KM a una media de 25,3KM con 1.600 metros de ascenso y 153 pulsaciones medias, más de 5.000 calorías consumidas.

No ha sido lo que esperaba en cuanto a que casi no he podido rodar en grupo pero estoy muy satisfecho. El primer calentón tras el pinchazo, el trozo en el llano con el grupo, y luego la lucha contra el viento manteniendo muy bien el tipo y creo que con 150 KM en las piernas he tirado más que dignamente de Martorell hasta la entrada de Barcelona. Si tenemos en cuenta la lentitud de los primeros kilómetros y de los últimos, la media es superior a 26 KM/hora, así que creo que me he ganado el plato de macarrones y pechuga de pavo que me he tomado a las seis de la tarde tras una extensa sesión de estiramientos, agua fría en las piernas y auto masaje. Día de cómida-merienda-cena.

Con la salida de hoy he completado otra semana de 12 horas, con dos buenas sesiones de run.

Judith hoy tenía tirada larga de 2h30, confirmando su buen estado de forma ha mejorado los últimos registros, corriendo más rápido, más kilómetros y a menos pulsaciones. 24 KM con casi 300 metros de ascenso por los bosques de casa, muy, muy tranquilita.

Con esta tirada completa la primera semana del nuevo ciclo de carga, 8h37 y 73 KM con dos entrenamientos de calidad y una tirada larga. Semana perfecta en la que ha cumplido con todos los entrenamientos previstos en cuanto a ritmo, distancia y pulsaciones: BUENISIMAS SENSACIONES!!!!!!!!!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

teneies un comentario en la entrada the kerry way.
podeis contestar?
ester

Pablo dijo...

Hola Ester, no me aparece tu direcció de correo. Si picas en "Ver todo mi perfil" arriba a la derecha del blog, me puedes enviar un mail, te contesto con toda la información detallada.